Para sacar la baldosa, en el caso de que esté desprendida, la misma saldría sin ninguna dificultad. En este caso hay observar el estado de la baldosa, si no estás rota y si se encuentra apta para una nueva colocación. Si la baldosa desprendida se encuentra entera y en condiciones para ser colocada nuevamente, lo primero que se debe hacer es limpiar la superficie en donde se colocará, y poner la cola para azulejos con una pequeña espátula dentada.
Colocada la baldosa sobre la superficie limpia y encolada, debe presionarse con fuerza justa y precisa hasta nivelarla. Luego de que están secas, se debe rellenar las uniones con mortero y dejar secar nuevamente, retirando posteriormente, con la baldosa y las juntas secas, los restos que queden.
La ruptura de baldosas
En el caso de una la baldosa rota, o desprendida que termina rompiéndose, lo importante es tener una baldosa de repuesto. En este caso hay un aspecto importante a destacar, y es el hecho de que, al momento de comprar las baldosas se compren demás, para poder tener de repuesto frente a cualquier despropósito, como el que estamos refiriendo. De lo contrario es posible que no encontremos una baldosa igual y en cantidades mínimas.
Al momento de sacar una baldosa rota, lo que se debe hacer es romperse del centro hacia los lados, usando un martillo o un cincel. Posteriormente se debe quitar los restos de baldosa adheridos al suelo. Se puede utilizar la rascadora para este último punto, con el fin de dejar lisa y limpia la superficie en donde se va a colocar la baldosa.